31 viviendas de protección oficial
2002
La imagen de algunos pueblos andaluces, con sus casas entrelazadas y agrupadas entre sí, como ocurre en el propio Montoro o en Arcos de la Frontera, ha sido el principal modelo de referencia para este proyecto. Otra referncia ha sido el proyecto diseñado en 1958 por Sven Markelius para Ör, en el municipio de Sundbyberg en Estocolmo (Suecia).
Los elementos determinantes en este proyecto han sido el paisaje y el terreno del solar. La presencia del paisaje ha jugado un papel importante. Se han orientado todas las casas hacia el mismo, buscando la correcta orientación de cada vivienda, su aireación y la existencia de espacios al aire libre, a nivel público y privado. Se propone un solo modelo o tipo de vivienda, que se puede ir agrandando y repitiendo constantemente. Una célula autónoma capaz de funcionar por sí misma, que crece o disminuye según el programa de dormitorios requerido. La repetición de esta estructura elemental es la que proporciona el principal tema arquitectónico del proyecto.
La fuerte pendiente de la parcela alcanza los diez metros en su punto más desfavorable. Esto hace que el tema del proyecto, que es la repetición de una célula básica, se enfatice al escalonarse las casas, apareciendo como un graderío o belvedere del paisaje. De esta forma, las viviendas se adaptan de forma sostenible y natural a la topografía, liberando al máximo la superficie disponible en planta baja.
Liberar la planta baja de ocupación permite plantar más vegetación, evitar el contacto de las ventanas de las casas con el tráfico y ruido de las calles y crear la sensación de encontrarse en un medio natural. Todas las casas están apoyadas en el terreno sobre dos pies, que separan el plano de la vivienda del terreno y de la pendiente de la colina. Este recurso permite liberar la planta baja y proporciona espacios versátiles donde poder dejar las bicicletas (o el coche), jugar, charlar, relacionarse, etc. Se crea así un lugar de relación entre los futuros habitantes de este barrio. Un espacio público que es objeto de un cuidadoso diseño, estudiando las circulaciones de los peatones y coches, así como los espacios verdes.
En la planta alta, la vivienda se organiza en forma de L que incorpora a los dormitorios. el comedor, el baño y la cocina. Todas estas estancias están en relación directa con un patio-terraza o con las cubiertas ajardinadas de las casas vecinas, espacios a través del cual se asoman al aire libre y al paisaje.